¿Sientes que llevas un lío en la cabeza y necesitas desahogarte?

Sólo con el hecho de tener que ordenar tus pensamientos para convertirlos en palabras al hablar conmigo, ya estarás realizando un ejercicio de reflexión que te permitirá obtener más luz en tu realidad. Mis preguntas serán claves para ayudarte a profundizar y que obtengas el beneficio máximo de la sesión. 

A veces nos sentimos mal y ni siquiera podemos identificar qué es lo que nos pasa. Tener claridad te dará la fuerza que necesitas para empezar a buscar la salida a tus preocupaciones.  

Esta sesión te va a permitir tener ese momento contigo que tanto te mereces y que es posible que hayas descuidado. Estás invirtiendo en ti y en tu bienestar. Hablar de tus sentimientos con una persona que es ajena a ti y a tu entorno, que es profesional y que se debe a un código de confidencialidad te dará la libertad de deshacerte de todas esas máscaras y ser TU. Quizás te sorprendas y descubras aspectos de tu persona que tenías olvidados o que incluso ni sabias que existían. 

Vomitar nuestras emociones es una de las estrategias que más se utilizan en la intervención en crisis. Sin embargo, en nuestro día a día, a veces cuesta encontrar el espacio para sincerarnos y decir todo lo que sentimos. Hacerlo no siempre resulta políticamente correcto, tememos ofender a alguien o sencillamente no nos apetece nada que nos den sermones y nos den soluciones que para nosotros son difíciles de poner en practica. Ya se sabe, es fácil lidiar al toro desde la barrera. Las emociones tienen su función y pueden sernos de mucha utilidad si sabemos gestionarlas adecuadamente, el primer paso es expresarlas y esta sesión es el lugar perfecto para empezar a ventilar. 

A veces vivimos situaciones que nos hacen sentir cosas que nunca antes habíamos percibido. Puede que te sientas diferente por la intensidad, frecuencia o duración de tus síntomas. Experimentas la realidad de manera distinta y el sólo hecho de sentirte diferente puede agravar la situación. Cuando entiendes que tu reacción es la lógica a la situación que estás viviendo y que muchas personas se sienten de forma similar ante las mismas circunstancias dejas de sentirte como un bicho raro y  eso ya consigue que disminuyan las sensaciones corporales desagradables. En esta sesión te ayudaré a normalizar tus síntomas y a neutralizar ciertos pensamientos negativos. 

Poder desahogarte con alguien, poder sentirte una persona escuchada y comprendida te permitirá disminuir la presión. En estos momentos, todas tus preocupaciones están acumuladas en tu interior y necesitan una válvula de escape. Esta sesión te ofrecerá el alivio que necesitas. El sólo hecho de hablar las cosas es en sí mismo terapéutico, te ayuda a exponerte a tu situación desde un lugar diferente y funciona.

Además, tienes que saber que quien te escucha es una profesional con más de veinte años de experiencia. He trabajado en muchos frentes (soy psicóloga clínica, legal y forense, psicóloga policial y de emergencias), pero mi especialidad es la intervención en crisis y ofrecer una asesoramiento rápido y útil a las personas a las que atiendo. Hablaré claro y te daré consejos para mirar para adelante y buscar soluciones, no para quedarnos enquistados en situaciones pasadas que ya no podemos modificar. Si es conveniente te ofreceré pautas de afrontamiento y te señalaré a qué otros profesionales podrías acudir y que les tendrías que solicitar en el caso de que se trate de temas especificos.

Poner orden al caos empieza por desahogarte. Compormeterse con tu bienestar emocional y con tu equilibrio mental es el mejor regalo que te puedes dar. Puede que lo necesites, pero lo que es seguro es que te lo mereces!